Los problemas durante esta pandemia han llevado crear dificultades profundas en las familias, se han fracturado las relaciones interpersonales y se ha acrecentado el mal manejo de las emociones y frustraciones lo que lleva a algunas personas a replicar la violencia en casa en muchas ocasiones entre los padres, o de los padres hacia los hijos en su mayoría.
Se describieron los tipos de violencia que se pueden dar y de cómo la cultura del país lleva a callar esta violencia que ocurre, pero que es importante no callar si no expresar y buscar ayuda de persona en especial de profesionales que nos ayuden en casa a cambiar estas conductas en casa. Se hablaron de las consecuencias que puede tener en las personas la violencia intrafamiliar entre ellos aislamiento social, baja autoestima problemas de aprendizaje estrés postraumático, conducta sexual inapropiada, suicidios e intentos suicidas, entre otras.
En ocasiones el vivir en violencia nos hace pensar y tener ideas de que la violencia es algo normal y que acompaña el amor. Dentro de la presentación del tema se buscaron a través de pasajes bíblicos el hacerles ver como Dios busca que la relación familiar sea cordial y servicial llenas de amor y cuidado por cada uno de los miembros de la familia, ese ha sido el plan de Dios desde el principio. Se dieron consejos de cuáles podrían ser los pasos a seguir para las personas que están sufriendo violencia, lo primero es que se debe poner en un lugar seguro a la persona que está siendo víctima, luego poder confrontar la situación y a la persona que está violentando, buscar la restitución y la sanidad, dando un acompañamiento a la familia completa.
Damos gracias a Dios por haber podido tocar este tema de pues es de mucha importancia para los jóvenes quienes muchas veces no se sienten capaces de hablar del tema por temor o por vergüenza, pero los llena de culpa y dolor.